Una persona se quedó sin empleo debido a una reestructuración en su compañía. Después de 18 años, y habiendo alcanzado un buen nivel de competencia y profesionalidad, además de cierta responsabilidad dirigiendo proyectos y equipos, se encuentra en un momento complicado, ya pasados los 45 años, y con un sabor amargo ya que sus últimos años en la compañía habían sido muy duros, ya que las restricciones y presión le habían desencantado de su profesión.

¿Te suena esta historia?. Se repite más asiduamente de lo que creemos. Y no con personas de más de 45 años, sino con todos los rangos de edad. ¿Podrías encontrarte alguna vez en esta situación?

Esta persona se puso en contacto con Mutare enviándonos su perfil profesional. Pronto nuestra unidad de Interim Management la llamó para un proyecto de duración de 6 meses, prorrogable. Cuando estuvimos entrevistándolo mostró ciertas reticencias a formar parte de un proyecto corto, ya que ella buscaba algo más “estable”. Nuestros profesionales, asesorándole sobre el mercado laboral, estuvieron conversando sobre el proyecto y  la posibilidad de poder trabajar en otros proyectos más adelante en la modalidad de Interim Managament que supone la capacidad de resolver situaciones específicas en momentos determinados.

Aunque con reticencias, aceptó el reto. Después de ese proyecto, que tuvo excelentes resultados, se embarcó en otro proyecto para la misma compañía, esta vez con una duración más larga. Ahora está encantada con la capacidad de ir resolviendo proyectos y poder gestionar su carrera profesional. Además de su incorporación al mercado laboral, le ha cogido el gusto a trabajar por proyectos pudiendo involucrarse en las necesidades específicas, y permitiendo tener una objetividad y autonomía para dirigir su carrera profesional.

Las relaciones laborales están cambiando. Mutare Transformación Positiva

El área de Mutare de Interim Management permite incorporar profesionales a las empresas que aborden proyectos específicos, con la posibilidad de continuidad, o para poder ayudar en la consecución de objetivos, con un marco temporal.

Sin duda, las relaciones laborales están cambiando. Los llamados Knowmads son profesionales que ponen su conocimiento al servicio de determinados proyectos, estableciéndose una vinculación determinada, sin tener que generar “ataduras de por vida” tanto para el profesional como para la empresa.

Trabajar en ámbitos temporales, donde el profesional decide cómo y cuándo, así como la flexibilidad que supone para la empresa, es sin duda el gran reto y el presente de las relaciones laborales.

Poder gestionar con quien y como trabajamos, así como la posibilidad de ofrecer nuestro conocimiento en diferentes organizaciones, genera riqueza experiencial y posibilidades múltiples de tener un desarrollo personal y profesional fascinante para la persona.

Las relaciones laborales, en continua evolución, ofrecerán la oportunidad de trabajar en sitios diferentes, para distintos proyectos, y gestionando nuestro tiempo. ¿Debemos asustarnos por ello?. Sin duda la respuesta es que debemos plantearnos el poder formar parte de un ecosistema profesional que nos permita un avance y mejora en nuestro conocimiento, así como un progreso hacia un nuevo marco de relaciones con las organizaciones.