“Es cuestión de actitud”. Esa es la respuesta cuando alguien se tiene que enfrentar a un Reto o un Problema que puede tener un grado de dificultad.
En el mundo profesional la Actitud es clave para desarrollar afrontamiento de problemas y adversidades, tal y como comentamos en el anterior Estudio titulado: “¿Cuál es la actitud Correcta en las empresas?
Hoy aportamos unos datos que pueden “abrir los ojos” de los Responsables de equipos.
Se trata del estudio realizado entre empresas de diferentes tamaños y sectores sobre Los costes asociados a una actitud inadecuada. Los que hemos detectado son los siguientes:
- Con actitud inadecuada se produce una Menor eficacia en las ventas = oportunidades perdidas que no regresan
- Pérdida de la productividad acumulada: Este es un indicador que nos dice como baja el rendimiento cuando no se tiene la actitud adecuada
- Peligro de contagio / pandemia organizacional: Posibilidad de que otras personas caigan en actitud negativa por “Contacto” con personas con la actitud inadecuada
- Gastos / Costes inesperados por rescisión laboral: En el caso extremo de tener que prescindir de esa persona los costes asociados a una rescisión de contrato
- Costes de búsqueda de nueva persona: Proceso de búsqueda e incorporación de encontrar otra persona adecuada, adicionalmente el tiempo en el que no está la persona en el puesto sin realizar las tareas correspondientes sin ofrecer resultados
- Curva de aprendizaje de la nueva incorporación: Tiempo en que la nueva persona empieza a ser productiva y eficaz
En el proceso de Captación de talento, también es fundamental el poder acertar con la Actitud adecuada de las nuevas incorporaciones. Para eso es importante “acertar desde el principio”.
Si hay algo que debemos destacar de todo esto, es que los Comerciales / Vendedores deben ser soñadores que confíen plenamente en que van a conseguir sus ventas.
¿Merece la pena enfrentarnos a estos posibles costes? ¿Puede ser la solución la posibilidad de modificar la Actitud?.
La buena noticia es que La Actitud se puede modificar.
Las habilidades y conductas de las personas se pueden modificar y flexibilizar para adaptarlas a las necesidades del puesto de trabajo, de sus tareas, y de la compañía, juntamente con sus Valores y Cultura.
Para ello las personas Tienen que ver los beneficios de ese cambio actitudinal. Se les debe convencer y seducir para que acepten el cambio, ante otras posibles consecuencias lesivas para ambas partes, empresa y empleado.
Para ello debemos localizar y gestionar el Tipo de Actitud que tienen nuestros empleados y colaboradores.
A través de la herramienta ACT+ (actpositiva.com) llevamos identificando actitudes diferentes entre personas en la organización. Eso nos permite tener un diagnostico para poder acometer el Cambio Actitudinal.
A partir de ese diagnostico se realiza un programa de Gestión del Cambio Actitudinal para poder acometer el proceso de Cambio a través de impactos como Aprendizaje Vivencial y Consultoría de gestión del Cambio. Pudiéndose hacer de manera individual o por equipos.
Mas información en info@mutare.es
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